El secreto del sabor está en el pastrami con su inconfundible toque ahumado y exquisito.
Dentro del vasto universo de las carnes ahumadas, el pastrami se alza como una culinaria incomparable. Originario de la tradición judía y perfeccionado en los establecimientos especializados de Nueva York, el pastrami no es simplemente un embutido; es una experiencia sensorial. En esencia, se trata de carne, comúnmente de pecho de res, curada con una mezcla única de especias, ahumada con esmero y cocida al vapor hasta alcanzar su jugosidad inigualable.
Ya sea para una comida informal o una cena especial, el pastrami es la elección perfecta para sorprender a tus invitados. Puede ser el protagonista de un suculento sándwich, o brillar como ingrediente estrella en ensaladas o pizzas. Descubrí con Recetas Nestlé® la versatilidad del pastrami y por qué es la elección acertada para almuerzos rápidos, cenas especiales o simplemente para esos antojos nocturnos. Disfrutá con este práctico y delicioso artículo.
¿QUÉ ES EL PASTRAMI?
Para los amantes de la charcutería, el pastrami es la encarnación misma de los sabores deseados en una carne, proporcionando una mezcla cautivadora de sabores que evocan la carne asada y la salchicha. Sin embargo, su sabor no proviene únicamente de la carne con la que se elabora, sino del ingenioso método de preparación.
El proceso se inicia al sumergir la carne cruda en salmuera, seguido de un masaje con sal, ajo, azúcar y especias. Después, se lleva a cabo un curado en seco, seguido de un ahumado y finalmente, una cocción al vapor. El pastrami es una de las carnes más emblemáticas de la cocina judía estadounidense, especialmente en la escena culinaria neoyorquina. En esta ciudad, el pastrami es la estrella de numerosos restaurantes, siendo el “pastrami on Rye” una famosa receta, que consiste en lonchas de pastrami servidas sobre pan de centeno, creando así un sándwich inigualable y muy delicioso.
CONOCÉ EL ORIGEN DEL PASTRAMI
Aunque el pastrami es un ingrediente muy popular en Nueva York, este embutido clásico, con su sabor inconfundible resultado de una mezcla única de especias picantes, tiene una fascinante historia que ha viajado a través de países y continentes. La palabra pastrami proviene del rumano “pastrama” que es una antigua técnica de conservación de carne en la época anterior a la refrigeración. Esta técnica fue llevada a Nueva York en el siglo XIX por la ola de inmigrantes judíos de Besarabia y Rumania. Inicialmente aplicada a la carne de cordero, la receta fue adaptada al vacuno, marcando así el nacimiento del pastrami tal como lo conocemos hoy.
La gran transformación para el pastrami ocurrió en los icónicos delicatessens de Nueva York a principios del siglo XX. La carne, inicialmente curada y ahumada para preservarla, se comenzó a cortar en finas láminas y se servía entre dos rebanadas de pan de centeno, creando así el famoso sándwich de pastrami. Este plato se popularizó rápidamente y se convirtió en una tradición culinaria arraigada en la cultura neoyorquina y, posteriormente, en la estadounidense. La historia del pastrami es un testimonio del mestizaje gastronómico y la capacidad de transformación de las recetas tradicionales a medida que cruzan fronteras y generaciones.
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¿CÓMO HACER PASTRAMI?
El pastrami, un producto de origen animal, suele elaborarse principalmente con falda de ternera, aunque existen variedades menos conocidas que utilizan diferentes carnes, como pavo, pollo, ganso, cordero, cabra, venado e incluso algunos establecimientos, alejándose de la tradición kosher, optan por carne de cerdo.
Por lo general, el primer paso en la preparación del pastrami implica sumergir la carne en salmuera. Algunos métodos específicos sugieren un aliño seco en lugar de una salmuera húmeda, pero en ambos casos, la sal juega un papel crucial en el curado, ya que contiene nitratos, responsable del característico tono rosado que se asocia con el pastrami y no es dado por el tipo de carne que se use. Posteriormente, la carne se recubre con una mezcla de especias y se ahúma hasta alcanzar la ternura deseada.
Por lo general, se prefieren carnes magras, ya que se adaptan bien al extenso proceso de curación y cocción, donde las fibras musculares duras se descomponen. En algunas recetas, se requiere una cocción adicional al vapor para romper aún más los tejidos conjuntivos. Finalmente, para servir, la carne se corta en lonchas finas. Como podrás ver el proceso del pastrami es lento que puede llegar a durar semanas en el caso de las mejores recetas.
DESCUBRÍ LOS TIPOS DE PASTRAMI
En la amplia gama de ingredientes y recetas, la diversidad a menudo se traduce en placer. Por ello, es probable que encontrés pastramis que difieren al tradicional que conocemos por su carne de tonos rojizos, que parece ligeramente tostada, sino que también se presenta en diferentes variantes, siendo el pastrami rojo y negro dos de las opciones más destacadas.
- Pastrami rojo: También llamado pastrami al estilo de Nueva Inglaterra se caracteriza por su intenso color rojo y sabor robusto. Este tipo de pastrami se obtiene frecuentemente mediante la adición de pimienta, pimiento, cilantro y semillas de mostaza, donde las especias no solo mantienen la carne húmeda, sino que también le otorgan un color rojo brillante, todo ellos con un tiempo de cocción corto.
Algunos prefieren añadir remolacha al proceso de curado, que no solo le otorga su distintivo tono rojo, sino que también una nota adicional de dulzura, realzando la jugosidad de la carne.
- Pastrami negro: También conocido como “Black Pastrami” o pastrami al estilo neoyorquino, se destaca por su cubierta exterior de especias negras y tener un sabor más intenso. Este se elabora mediante la adición de especias, como granos de pimienta negra, junto con otras mezclas aromática y, en ocasiones, melaza, aplicadas generosamente sobre la superficie del pastrami antes del proceso de cocerlo.
Este tratamiento no solo imparte un color más oscuro, sino que también imparte un rico sabor y crea una corteza sabrosa que contrasta perfectamente con la carne suave de su interior.
DESCUBRÍ EL ARTE DEL CORTE PERFECTO DEL PASTRAMI
El pastrami al ser una deliciosa creación de carne curada y ahumada que requiere bastante tiempo de preparación, merece ser tratada con la maestría que se le otorga a una auténtica joya culinaria. Para lograr el corte perfecto del pastrami, es esencial seguir algunos consejos clave que realzarán tanto su textura como su sabor. Tomá nota y aplicá los siguientes tips.
- El corte perfecto: El pastrami, con su exigente proceso de preparación, puede resultar intimidante al enfrentarse a realizar el primer corte. No obstante, con tranquilidad y practica lo podés lograr.
- Utilizá un cuchillo afilado para lograr rebanadas uniformes.
- Realizá el corte en sentido contrario a las fibras de la carne para mantener su ternura.
- Grosor adecuado: El grosor adecuado, dependerá del uso de la receta que vayas a preparar.
- Para sándwiches, optá por rebanadas muy delgadas.
- Si el pastrami es la estrella del plato o acompañará otros ingredientes, realizá cortes más gruesos, sin superar el centímetro de grosor.
FUENTES:
https://www.196flavors.com/es/pastrami/
https://oureverydaylife.com/different-cuts-of-steak-12156691.html